Reconozco que no me pasa en todas las facetas de mi vida, pero creo que estoy siendo capaz de afrontar la maternidad en el tono más positivo y alegre posible. Intento encarar todas las circunstancias con templanza, sobre todo, entendiendo los comportamientos de mi niño.
Esto me está ayudando a no enfadarme demasiado con él, y a no hacer de la maternidad un eterno estado de enojo, como he observado que les pasa a muchas madres y padres, que no dan un respiro a sus hijos entre regañina y regañina, salpicado con algún reproche – Apunte: con esto no digo que sea perfecta, ni la mejor madre del mundo, pero creo que es “un truco”, llamémoslo así, para vivir la maternidad de una manera más feliz.
A llegar a este punto, me ha ayudado mucho el concepto explicado magistralmente por el doctor Carlos González en sus libros, que habla de que el niño no hace las cosas para probarte o retarte, sino que las hace por necesidad, con el único fin de cubrir algunas de sus necesidades.
De este modo, veo a mi niño de otra forma, y entiendo sus llantos, sus rabietas e incluso sus malas formas en algunas ocasiones -estamos en plena etapa de inicio de "los terribles 2", no os digo más... Esto no significa que consienta el mal comportamiento (como a veces algunos interpretan a la hora de hablar de crianza natural) pero sí me ayuda a no salirme de mis casillas y a entender qué está pasando por su cabeza.
Gracias a esto he sido capaz, y me siento orgullosa de decirlo – sobre todo teniendo en cuenta el carácter tan explosivo, y a veces malhumorado, que me gasto (preguntadle a mi novio)- de no haber perdido nunca los nervios – bueno, dejémoslo en no haber perdido “demasiado” los nervios – con mi niño.
Esto me está ayudando a no enfadarme demasiado con él, y a no hacer de la maternidad un eterno estado de enojo, como he observado que les pasa a muchas madres y padres, que no dan un respiro a sus hijos entre regañina y regañina, salpicado con algún reproche – Apunte: con esto no digo que sea perfecta, ni la mejor madre del mundo, pero creo que es “un truco”, llamémoslo así, para vivir la maternidad de una manera más feliz.
A llegar a este punto, me ha ayudado mucho el concepto explicado magistralmente por el doctor Carlos González en sus libros, que habla de que el niño no hace las cosas para probarte o retarte, sino que las hace por necesidad, con el único fin de cubrir algunas de sus necesidades.
De este modo, veo a mi niño de otra forma, y entiendo sus llantos, sus rabietas e incluso sus malas formas en algunas ocasiones -estamos en plena etapa de inicio de "los terribles 2", no os digo más... Esto no significa que consienta el mal comportamiento (como a veces algunos interpretan a la hora de hablar de crianza natural) pero sí me ayuda a no salirme de mis casillas y a entender qué está pasando por su cabeza.
Gracias a esto he sido capaz, y me siento orgullosa de decirlo – sobre todo teniendo en cuenta el carácter tan explosivo, y a veces malhumorado, que me gasto (preguntadle a mi novio)- de no haber perdido nunca los nervios – bueno, dejémoslo en no haber perdido “demasiado” los nervios – con mi niño.
Yo creo que estoy llegando también a ese estado " zen " de la maternidad....Solo falta que mi marido también lo entienda y consiga controlarse un poco...
ResponderEliminarGracias LadyA, creo que estamos en el mismo punto... pero ¿será un estado zen o el cansancio que nos atonta? ajajjaajajajaj... besos y gracias por estar siempre ahí!
ResponderEliminarno,no... yo voto por el estado zen... aunque puede estar inducido por la falta de sueño y el cansancio....pero eso puede ser un secretillo entre nosotras!!! Tu le dices a alguien que estás en un estado Zen y quedas divina de la muerte...ja,ja,ja.
ResponderEliminargracias a ti por sacarnos una sonrisa con tus posts
jaja yo estuve en ese estado...hasta lo recuerdo pero ultimamente sera que son muchas cosas a la ves que me han llevado a perderlo al igual que A m8i esposo...pero voy a retomarlo!
ResponderEliminarno me conoces..ando aqui de metiche me llamo mucho la atencion el nombre de tu blog te vi en un enlace de "mi mama me mima..demaciado" y me gustaria seguirte si no te molesta! por aca tenemos igual un blog de maternidad y bebes sin fines formativos y con ideas de la madre (yo) asi...sijn clasificacion de todo un poco ojala que nos visites tambien :)
lagalletademama.blogspot.com
Ojalaaaaa pueda!
ResponderEliminarHasta ahora pude tomarme el embarazo y los primeros meses del bebe con una paz irreconocible. Deseo lograr tomarme así las cosas con el correr del tiempo. Cuando antes imaginaba mi rol de mama siempre tuve miedo de ser muy chinchuda retándolo todo el tiempo. Haré todo lo posible para controlarme "Ommmmmmmmm"
Hola BR, por supuesto... sígueme a donde quieras... jajajaj... estamos en contacto...
ResponderEliminarFlorencia, creo que son las hormonas, porque yo soy de naturaleza nerviosa e impaciente y con mi niño estoy echando una paciencia inaudita...
Muchos besos a todas y a controlarnos!!!
Yo creo que todas las madres entendemos esa sutil diferenciaq ue mencionas : la distancia que hay entre no perder los nervios y no perderlos "demasiado" XDDDD
ResponderEliminarAins, si es que deberían venir con manual de instrucciones ^^
Hola SE... me temo que ni con manual de instrucciones esto sería más fácil... jejejeje...
ResponderEliminarBesos y gracias por el comentario.
suerte con tu bebé aunqe parece que lo llevas muy bien eso de ser madre!!
ResponderEliminarbesos:)
Fiona's World, gracias por tu comentario... la maternidad se lleva como se puede ;-)
ResponderEliminarme ha encantado tu post, ojalá todas las mamás pudieran pensar así, ojalá el optimismo que poseo actualmente no me abandone cuando sea madre
ResponderEliminarMamá, entiendo a la perfección lo que dices.Es más a mí mi nena a lo que me ha ayudado es a escucharme a mi misma sin distorsiones y eso ha revertido en el bien de todos. El domingo hace 2 añitos! Está claro que cuánto más tranqui estás contigo misma, que ha sido todo un proceso...mucho mejor, lo malo es el maldito cansancio y la imposible conciliación!
ResponderEliminarTú misma lo has dicho muy bien: aprender a ponerse en el lugar del niño.
ResponderEliminarPonerse en el lugar del otro, lo que todo el mundo considera una virtud, resulta que para muchos no es así cuando se trata de los niños: en ese caso, el niño siempre quiere "tomarte el pelo."
Ponerse en el lugar del niño es la manera como tú dices de afrontar la maternidad con alegría y felicidad, y además, de crecer, aprender, abrir la mente...de llegar al estado zen que dice LadyA, jejeje...
Muy sano para todos, sí señor.
Un abrazo!!!
Tienes un regalito en mi blog... pasate a recogerlo.
ResponderEliminarDeje un pequeño regalito para vos en mi blog :)
ResponderEliminarMuy lindo blog, me encanta.
ResponderEliminarAlgo así, como dice el título de tu página, es lo que pensé yo, una vez mamá
Saludos desde Argentina
Elisa
Yo es que reconozco que no puedo llegar al estado zen, punto.
ResponderEliminarUn supersaludo
Hola!
ResponderEliminarY cual es el libro de Carlos Gonzalez? Me podrías decir el título? Estoy haciendo acopio de información!
Saludos.
Gracias a todos por los comentarios... y por los regalitos en los blogs de mis amigas... :-)
ResponderEliminarBarriguilla, cualquier libro de Carlos González es super recomendable, desde mi punto de vista, pero para empezar "Bésame mucho", está genial!
Besos a tod@s
Begoña
uff pues yo pierdo los nervios unas... 40veces al dia?? y esque con mi hijo no hay entendimiento posible,ya no se la cantidad de veces que me dice que va a portarse bien pero a los 5minutos me esta liando algo, menos mal que el jueves comienza el cole y se reencontrara con sus amigos y volveremos a la normalidad porque si no me volveria loca!
ResponderEliminarLindo blog, yo soy abuela de dos niños je, je la niña celiaca.
ResponderEliminarbesitos para todos
Interesante tu secciones de post! los he leido y me he identiificado en algunas cosillas :) Saludos y sigo por aqui leyendo Saludos.
ResponderEliminarHe pasado por aqui, y me ha gustado mucho tu blog, claro , sencillo y lleno de vida.. y quien ha dicho que en la vida no se pasan todos los sinsabores? y que la maternidad es un sueñor rosa? Pero tu post esta lleno de realidad con optimismo y sabiduria.. si nos cuesta a nosotros los adultos autocontrolarnos, esperar, y no malhumorarnos imaginate nuestras criaturas!! Entenderlo no quiere decir malcriar! que bueno que pensamos igual, y yo tambien soy bien impulsiva y a veces cascarabias, pero pensar en lo que dice tu referencia el Doc Carlos es asi... y aunque reten y desafien que tambien es parte de su desarrollo, las mamás debemos aprender a tomarla suave.. muy suave... jajajaja.. Mis saludos.
ResponderEliminarGracias por tus cometarios Liliana! Me voy a poner colorada...
ResponderEliminarBesos
Begoña