martes, 22 de junio de 2010

Un domingo cualquiera…

Me toca a mí, ya me levanto… voy al baño ¿me peso? Mierda, estoy igual de gorda. Intento alisarme el flequillo, pero con mi niño correteando entre las piernas es misión imposible, pues me lo dejo tieso, total…

Y ya en el parque, después de 10 minutos empujando el columpio, arranco a mi hijo pataleando de ese artefacto del demonio, para que otro niño pueda subirse, y sólo acierto a decir: – si normalmente no llora, si él sabe que tiene que compartir… ¿qué otra cosa podría decir a una mamá impaciente?

Menos mal que pronto llega papá, y nos vamos a la piscina de unos amigos… charla, risas, barbacoa, cotilleos… y os ahorro lo de pon-pañal-quita-pañal, pon-crema-solar, hijo-no-te-quites-la-gorra-que-hace-mucho-sol… y esos detalles que ya os sabéis.

- ¡Cuidado papi con el niño y la piscina!...

Unas patatas y 4 aceitunas más tarde

- Entonces, ¿qué pasó?... ay, ay, ay… voy a por el niño que se va a caer a la piscina…

1 chorizo, 3 pinchitos y dos trocitos de tarta más tarde

- Qué rápido ha pasado el día, esto lo tenemos que repetir, ¿eh?… - y entonces, me tiro al agua, con camiseta, pantalón y zapatos, para rescatar a mi niño que se ha caído a la piscina.

Llegamos a casa, con ropa prestada. Deambulo por las habitaciones recogiendo cosas y me acuerdo del trabajo y pongo cara de perro (ehhhhhhhhhhh… un saludo para mis jefes y clientes – con un gesto muy teatral, a modo de dedicatoria, golpeo 3 veces mi pecho con rápidos toquecitos y alzo mi brazo al cielo apuntando al infinito con mi dedo índice).

Mi niño cena con papi (salchichas con ketchup –tiene que comer más fruta) y en uno de mis viajes de autómata oigo un alegre: ¡Hola mami…! me lo como, me lo como a besos, a abrazos, y noto su cuerpecillo entre mis brazos que se retuerce de risa, me babea en un intento de beso y se agarra a mi con sus diminutas manillas (vaya, se me ha olvidado cortarle las uñas – mañana sin falta).

Este es un domingo cualquiera, de una madre cualquiera. Y por todo esto, mis amigas y yo hemos decidido que los regalos por los hijos que ya están en camino, no serán para los bebés, sino para las mamás, porque estos domingos cualquiera merecen un homenaje a nosotras: las madres.

14 comentarios:

  1. Qué buen relato! Qué poco me queda a mi para tener esos domingos!!

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  2. Te juro que me he identificado literalmente con los paréntesis "(salchichas con ketchup –tiene que comer más fruta)" y "(vaya, se me ha olvidado cortarle las uñas – mañana sin falta)".
    Nosotros por lo general no salimos mucho pues el domingo nos queda para limpiar en las mañanas, dormir un poco en las tardes y si nos da energías y tiempo, entonces salimos, sino a ver una peli de Disney entre los tres, comiendo palomitas de maíz o papitas.

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  3. Como me suena lo de las uñas¡¡¡¡jajaja, y yo pense q era la unica mala madre q al pobre de su peque a veces por falta de tiempo se me pasa cortarle las uñas...

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  4. jajaja, yo pense q era la unica mala madre q a veces por falta de tiempo se le olvida cortarle las uñas a su peque y el pobre araña...

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  5. Así es, la vida se pasa muy deprisa con tanto trajín de cosas por hacer, siempre pendiente de los niños y evitando miles de peligros de los que una no era consciente hasta que se convirtió en madre. No hay tiempo real para nosotras (como bien describes no hay forma de mantener una conversación o hacer una tarea sin ser interrumpida quince veces), no hay sensación de control sobre nuestra vida. Eso sí, el bienestar del niño es lo que nos hace seguir en pie pese al cansancio. Los adoramos y lo haremos siempre pese a este tiempo que no nos pertenece.

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  6. Muy buena idea lo del regalo para las madres!

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  7. Hola a todas, me alegro que os sintaís identificadas. Pues lo dicho, a homenajearnos todas.

    Besos

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  8. Qué bonito día, hasta con paréntesis y todo! Y me gusta mucho la idea de los regalos para las mamás, que cuando tienes hijo parece que se olvidan de tí!
    A mi primer hijo lo tuve en junio. Pues en los Reyes anteriores ya me hicieron regalos para él. Que genial, eh, pero siempre que sean "además" de los regalos para mí, no "en sustitución de". Que el tema de los regalos es sagrado!!!

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  9. Qué bonito día y qué .... normal, sí señor!!!
    El "Hola mami" de la cena jejejejeje, como si viera a mi niño. Y como si me viera a mi misma espachurrándole y comiéndole a besos.
    Qué bonito es esto de disfrutar la maternidad, hasta el punto de ver lo hermoso de estas cosas chiquititas.

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  10. Gracias por los comentarios Belén, Laky y hi, this is me!... qué remedio, lo iba a dejar que se hundiera... ;-) je, je, je

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